La Palabra de la Virgen: Como María

Sábado XI del tiempo ordinario

Y cuando los discípulos estaban reunidos con María, el Espíritu Santo los invadió con vehemencia; y con una fuerza arrolladora se pusieron a hablar palabras de vida convenciendo a millares de hombres a seguir a Jesús. Y bautizaron y edificaron la Iglesia.

Con María… era la presencia del amor. De un amor nuevo.

Si entre los cristianos nos amásemos como si María, nuestra Madre, estuviese entre nosotros, creo que tendríamos una mayor comprensión de la Palabra de Dios predicada por los discípulos de los Apóstoles. Además, esta Palabra penetraría en nosotros y en los demás tan firmemente que desencadenaría a nuestro alrededor la revolución cristiana…; pues, hay que decir que se está muy somnolientos y despreocupados y se nos pasa el tiempo entre mil vanidades, despachándonos por cristianos, mientras la revolución del odio invade el mundo.

Chiara Lubich