La Palabra de hoy: Vigilancia

Miércoles 19 de octubre de 2011

En la Primera Lectura, san Pablo nos anima a cuidar con diligencia todo nuestro ser para ofrecerlo a Dios. En el Evangelio, Jesús nos enseña acerca de la vigilancia que debemos tener sobre nosotros mismos y sobre la misión que él nos encomienda. Esto pudiera parecer una carga más que un camino de libertad espiritual. Sin embargo, debemos poner el énfasis en nuestra vocación al amor. El que experimenta ser amado, cuida lo que tiene en sus manos, porque con ello responde al amor primero que ha recibido. Vigilan los padres responsables sobre la vida de sus hijos, vigila el trabajador fiel sobre la responsabilidad que tiene encomendada. El amor nos libera y nos hace mantenernos en la solicitud por lo que Dios nos encomienda.

¿Sobre qué aspectos de mi propia vida debo tener hoy mayor vigilancia? ¿Cuáles son las obras de Dios que debo cuidar con especial diligencia?